Señor suelta a los cautivos,
el Señor abre los ojos a los ciegos,
el señor levanta a los encorvados,
el Señor ama a los justos,
el Señor custodia a los peregrinos,
mantiene al huérfano y a la viuda,
pero turba la senda de los pecadores.
Reinará el señor eternamente.
Salmo 146
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dimanche 20 janvier 2008
El peso
Llevo manchados mis sueños, mis ojos y mis manos. Hay ruidos que se trepan a mi piel cuando camino. Aquí estoy, Señor, desintegrándome en el polvo del camino. Estoy atrapado en esta rama con todas mis desdichas: mi único equipaje.
Esa tristeza que envuelve el alma, con ese dejo de esperanza ,que al fin siempre intentamos llevar para seguir adelante.Es un gusto pasar por tus letras.
ese reencontrarse con el sonido envolvente a veces ártico y fosforecente que nos lleva esa otra orilla con tantos otros habitos para hablarnos con otro extraño lenguaje que acaricia la piel del pensamiento y nos lleva a ese otro caminar de la ensoñación,percepciones que despiertan otros sentidos en la gran calle de nuestro ser delicioso viaje un placer leerle URANIA GUERRERO MÉXICO
4 commentaires:
Durísimo.
Sigo por aquí, leyéndote, empañandome con esa tristeza irresistible.
Un abrazo, compa
Viktor Gómez
Esa tristeza que envuelve el alma, con ese dejo de esperanza ,que al fin siempre intentamos llevar para seguir adelante.Es un gusto pasar por tus letras.
Un abrazo desde el Puerto de Talcahuano.
be bj
Hay ruidos que se trepan a mi piel cuando camino.
El peso. A veces quisiera encontrarme en alguna esquina con lo liviano, volar.
D
ese reencontrarse con el sonido envolvente a veces ártico y fosforecente que nos lleva esa otra orilla con tantos otros habitos para hablarnos con otro extraño lenguaje que acaricia la piel del pensamiento y nos lleva a ese otro caminar de la ensoñación,percepciones que despiertan otros sentidos en la gran calle de nuestro ser
delicioso viaje
un placer leerle
URANIA GUERRERO
MÉXICO
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